El misil hipersónico de Rusia provoca que EE.UU. agilice el desarrollo de armas láser.

Pruebas operacionales del láser de combate en el buque anfibio estadounidense Ponce

La necesidad de interceptar los misiles hipersónicos rusos podrían obligar a Estados Unidos a impulsar el desarrollo de láseres de combate, escribe 'The Washington Free Beacon'.  Según el director de la Agencia de Defensa Antimisiles estadounidense, el vicealmirante James Syring, su país está dispuesto a emplear 23 millones de dólares para desarrollar armas láser capaces de defender al país de los proyectiles hipersónicos rusos y chinos.  Los norteamericanos adoptarían esa medida a raíz de los recientes ensayos —el último, el 19 de abril— del planeador ruso Yu-71, portado por el misil balístico intercontinental UR-100N. 

Tres días después, China realizó la séptima prueba con éxito de su misil hipersónico DF-ZF.  El congresista Trent Franks, promotor de este programa, ha afirmado que el desarrollo de armas hipersónicas por parte de Rusia y China "cambia el paradigma" de la guerra moderna. A finales de abril se supo que la industria militar rusa fabricará en serie los misiles hipersónicos Tsirkón (también conocidos como Zircon) a partir de 2018 y que engrosarán los arsenales de sus los cruceros y submarinos de propulsión nuclear más potentes. (Jesús.R.G.)


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