China sospecha que en EE.UU. la interferencia satelital.

                              China sospecha que en EE.UU. la interferencia satelital: informe
 
Satélites de la NASA se interfirió con cuatro veces por separado en 2007 y 2008, posiblemente por los militares chinos, según un borrador de un próximo informe para el Congreso de los EE.UU.. El último borrador del informe de los Estados Unidos- China, Económico y de Seguridad de la Comisión de Revisión indicó que los hackers informáticos detrás de la interferencia adquirido la capacidad de dar órdenes a uno de los satélites en dos ocasiones. Los satélites están dirigidas para la observación del clima de la tierra y el terreno, de acuerdo con el informe que se presentará al Congreso el 16 de noviembre. Una copia del último borrador del informe fue obtenido por la AFP el jueves. Dijo que la cuenta de la injerencia en los satélites de vino de una conferencia de mayo 2011 para la Comisión por los EE.UU. la Fuerza Aérea .
 
Los hackers parecen haber explotado los sistemas de información de la estación de Svalbard por satélite (SvalSat), una estación de tierra de los satélites operados comercialmente en Spitsbergen, Noruega, para tener acceso a los satélites, según el informe. SvalSat se basa en la Internet para acceder a los datos y la transferencia de archivos, dijo, citando un reciente informe Nacional de Aeronáutica y del Espacio. El 20 de octubre de 2007, Landsat-7, una observación de la Tierra por satélite EE.UU. administrado conjuntamente por la NASA y el Servicio Geológico de EE.UU., con experiencia de 12 o más minutos de intervención, según el informe. Landsat-7 con experiencia otros 12 minutos o más de las interferencias el 23 de julio de 2008, según el informe.
 
Dijo que el 20 de junio de 2008, Terra EOS AM-1, un programa de la NASA gestionados de observación de la Tierra, experimentado dos o más minutos de interferencia, dijo.
Se indicó que los hackers detrás de la interferencia con Terra EOS AM-1 "dar órdenes logrado todos los pasos necesarios para comandar el satélite, pero no lo hizo." El 22 de octubre de 2008, Terra EOS AM-1 con experiencia de nueve o más minutos de intervención, según el informe, y "el responsable" de nuevo "logrado todos los pasos necesarios para comandar el satélite, pero no órdenes."
 
"Este tipo de interferencias plantea numerosas amenazas potenciales, sobre todo si se logra, en contra de los satélites con funciones más sensibles", dijo el informe.
"Por ejemplo, el acceso a los controles de un satélite podría permitir a un atacante de dañar o destruir el satélite", dijo la comisión.
 
"El atacante también podría negar o degradar, así como falsificar o manipular la transmisión del satélite", dijo. "Un alto nivel de acceso podría revelar la capacidad del satélite y la información, como las imágenes, obtenida a través de sus sensores." El informe destacó que no estaba relatando los hechos "sobre la base de información atribución específica", sino "porque las técnicas parecen consistentes con autoridad los escritos militares de China."
 
"Auténticos escritos militares de China abogan por tales actividades, particularmente en lo relativo al espacio terrestre de infraestructura , tales como instalaciones de control de satélites ", dijo el informe. El proyecto de informe también acusó a China de estar detrás de "una serie de actividades malintencionadas en cyber", incluyendo la participación a nivel estatal en los ciberataques, el espionaje industrial y el compromiso de los sistemas de EE.UU. y otros países de computación del gobierno.
 
"En 2011, EE.UU. y las organizaciones de gobiernos extranjeros, contratistas de defensa, las entidades comerciales, y varias organizaciones no gubernamentales con experiencia de un volumen sustancial de intrusiones en la red y los intentos con diversos vínculos con China", dijo el informe. China se ha negado reiteradamente cualquier participación del Estado en los ciberataques contra las agencias gubernamentales y empresas, entre ellos algunos muy publicitados ataques contra el gigante de Internet Google que desencadenó una disputa entre Washington y Beijing.

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