Tras los fuertes recortes motivados por las dificultades financieras y económicas que atravesó Portugal en los últimos años con consecuencias directas también en el área de Defensa, el Ministerio de la Defensa Nacional portugués (MDN), tutelado por José Pedro Aguiar-Branco, dispondrá en 2015 de un presupuesto que por fin sale de la senda del descenso. Los presupuestos del Estado para 2015 elaborados por el Gobierno Portugués establecen un monto de 2.216 millones de euros para Defensa, lo que representa un incremento del 1,8% respecto de 2014, año en que se destinaron 2.138 millones. Antes de su aprobación final, el presupuesto será sometido a debate político en sede parlamentaria. El MDN tiene en curso la Reforma 2020, un plan ambicioso para modernizar su Defensa en los próximos años. Los gastos de personal absorberán el 56,7% del próximo presupuesto militar, que destinará un 25,7% a la adquisición de bienes y servicios.
Un total
de 52 millones de euros se destinarán a financiar la presencia
portuguesa en misiones militares en el exterior, en el marco de las
Forças Nacionais Destacadas (FND), y 5,5 millones de euros serán gastos
en proyectos asociados a la Cooperación Técnico-Militar (CTM) con otros
países, principalmente con naciones de lengua oficial portuguesa. Los
restantes montantes serán absorbidos por el sistema de salud militar,
por la Ley de Programación Militar (LPM) y por la de Programación de las
Infraestructuras Militares (LPIM). Excepto la modernización en
Portugal de los cuatro navíos de patrulla SF300 adquiridos a Dinamarca
en octubre de 2014 por 4 millones de euros, la incorporación de diversas
mejoras en las fragatas, el programa de adquisición de vehículos
blindados 4x4, el incremento de las capacidades de las aeronaves de
transporte C-130H Hercules y la continuación del programa de mando y
control SIC-T y otras inversiones de menor cuantía, los recursos
destinados a equipamiento militar no permitirán mayor dispendio.
Se
espera asimismo con mucha expectación la próxima Ley de Programación
Militar, que deberá incluir los programas más importantes que permitirán
proseguir con la modernización de las Fuerzas Armadas. El Estado deberá
ahora alienar su posición en algunas de las empresas que ya integran el
holding portugués para las industrias de defensa, la Empresa Portuguesa
de Defensa (EMPORDEF). La llegada de material militar con mayor
relevancia pasa por la entrega al Ejército de 22 blindados Pandur II en
el marco de un acuerdo celebrado en septiembre de 2014 con GDELS. (Jesús.R.G.)
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