Se confirma que el Ejército de Perú adquirirá el fusil FN SCAR-H a pesar de que no superó las pruebas.
Según hemos podido
confirmar, el Ejercito del Perú a través del Ministerio de Defensa
(MINDEF)- está en vías de adquirir a FN Herstal (Bélgica), bajo la
modalidad de “proveedor único”, un lote de 8.110 Fusiles de Asalto
SCAR-H de 7.62 x 51 mm. a pesar de que este no logro superar la Prueba
de Seguridad en Combate y fue descalificado durante los Protocolos de
Pruebas realizados en agosto de 2012. El monto del contrato se cifra en
31,5 millones de dólares. Los FN SCAR-H serán asignados al Comando
Operacional del Sur (COS).
En la fase de pruebas, el FN SCAR-H fue cargado con un cartucho de
fogueo en la recámara y colocó el selector en tiro por tiro, tras lo
cual se procedió a lanzarlo desde una altura de 2,5 m. en cinco
posiciones, sufriendo una serie de fracturas en la estructura de
polímero. Al ser lanzado lateralmente, tanto desde el lado derecho como
izquierdo, sufrió una fractura a la altura del pasador de unión con el
cajón de mecanismos y la ventana de eyección, el cargador se rajó en la
parte inferior delantera y se deformo el apagallamas. Más adelante, al
ser lanzado con el cañón hacia abajo, la fractura se amplió, mientras
que al ser lanzado con la culata hacia abajo el cartucho de fogueo salió
eyectado (debido al movimiento del conjunto móvil) observándose una
ligera percusión en el fulminante.
Después, el FN SCAR-H fue lanzado con
el cargador (abastecido con 20 cartuchos) hacia abajo, que se abrió
considerablemente en la base. Ante tal situación, y de acuerdo a las
bases del proceso, el Comité Técnico-Operacional (CETO) decidió
descalificarlo y dar por concluidos los procedimientos. En los
Protocolos de Pruebas, realizados en la sede del Batallón de Comandos N°
19 y en las instalaciones de la Fábrica de Armas y Municiones del
Ejercito (FAME) – participaron además MKE con el G-3,
que fue descalificado al no garantizar una vida útil de 20.000
disparos, el LWRX RPER, descalificado al fallar en la prueba para el
combate en arena de playa, y Hekcler & Koch con el HK 417 y Lewis Machine Tools con el LM308 MWSE que fueron descalificados tras fallar en la prueba para el combate en lodo. La
adquisición del nuevo fusil de asalto para el Ejercito del Perú no ha
estado exenta de controversia. El proceso se inició en 2009 y fue
suspendido en mayo de 2010 por el entonces Ministro de Defensa, Rafael
Rey Rey, debido al reclamo de la Embajada de los Estados Unidos y a las
denuncias de irregularidades en los Protocolos de Pruebas a favor de uno
de los postores.
Ante tal situación, el Ministerio de Defensa creó la
Comisión de Estudio Técnico Operacional de Fusiles de 7.62 x 51 mm.
(CETO), que tras una profunda revisión del proceso y realizar una
evaluación técnica determinó las nuevas especificaciones técnicas
mínimas - que remplazaban a las inicialmente dadas a conocer por el
Servicio de Material de Guerra (SMGE) en Marzo de 2011 - y convoco a los
fabricantes a mediados de junio fijando dos etapas: Del 21 de junio al 7
de septiembre para la confirmación de participación, remisión de
documentación e internamiento de los fusiles, y desde el 10 de
septiembre para dar inicio a los Protocolos de Pruebas. Sin
embargo, dada la urgencia de contar con el material, el CETO adelantó en
un mes el inicio de los Protocolos de Prueba. Esta situación, sumada a
nuevas denuncias de irregularidades, imposibilidad de internar los
fusiles por falta de tiempo (específicamente retrasos en la obtención
del “Certificado de Último Destino”) y un supuesto favoritismo hacia uno
de los postores, motivo que Colt Defence con el LM901, DS Arms con el
SA58 CTC (Combat Tactical Carbine), IWI con el Galil ACE 52, LWRC, SIG
Sauer con el SIG-716 Patrol y US Ordnance con el MPR no pudieran u
optaran por no presentarse.
Las Especificaciones Técnicas solicitadas eran: longitud máxima de 1.10 m. (con la culata completamente extendida) y un peso sin cacerina no mayor a 4.8 kg. La velocidad inicial del proyectil en la boca del cañón deberá ser de 750 m/s, la cadencia de fuego no menor a 500 dpm y el alcance efectivo de 800 m. Además, el fusil debe ser de fácil operación y mantenimiento, resistente a impactos y golpes, con una vida útil no menor a 20,000 disparos, utilizar cacerinas de 20 cartuchos y disponer de órganos de puntería metálicos (alza y guion regulables), así como de por lo menos dos rieles picatiny (MIL-STD 1913) que permitan el uso de miras tácticas, visores nocturnos, linternas y lanzagranadas de 40 mm.
Las Especificaciones Técnicas solicitadas eran: longitud máxima de 1.10 m. (con la culata completamente extendida) y un peso sin cacerina no mayor a 4.8 kg. La velocidad inicial del proyectil en la boca del cañón deberá ser de 750 m/s, la cadencia de fuego no menor a 500 dpm y el alcance efectivo de 800 m. Además, el fusil debe ser de fácil operación y mantenimiento, resistente a impactos y golpes, con una vida útil no menor a 20,000 disparos, utilizar cacerinas de 20 cartuchos y disponer de órganos de puntería metálicos (alza y guion regulables), así como de por lo menos dos rieles picatiny (MIL-STD 1913) que permitan el uso de miras tácticas, visores nocturnos, linternas y lanzagranadas de 40 mm.
Fuente: http://www.defensa.com/
Un fusil que seguro se quiso vender a Peru fue G-36 Una primera objeción es la fragilidad del arma. Aunque no lo parezca, el G36 tiene algunos defectos similares al SA80: básicamente no está bien ensamblado, y aunque el material sintético pueda ser que en el caso del arma inglesa, no están bien unidas sus partes. Tal vez la parte más frágil sea la culata: los diseñadores se arriesgaron con un concepto interesante, pero aparentemente no pusieron mucho cuidado en este punto. Como se ha dicho antes, al disparar granadas de fusil, la culata se rompe. Lo mismo pasa si el fusil se cae, o si el soldado, al tirarse cuerpo a tierra, no lo hace de determinada manera. Al parecer esto se ha solucionado cambiando la forma de realizar esta acción, pero puede resultar muy molesto, por decir poco. La fragilidad de la culata implica otro riesgo: en el momento más peligroso de todos (se ha quedado sin munición, el arma no funciona, no hay espacio o tiempo para accionarla) tiene que aplicar la ahora algo desacreditada esgrima de fusil. La bayoneta del AK-47 es buena, pero no se puede utilizar porque el fusil puede literalmente desarmarse si el arma es usada para defensa personal. Y usar la culata como cachiporra no es, obviamente, una opción.
ResponderEliminarEl cañón también es frágil, y el soldado debe tener mucho cuidado de que no se golpee. Otra cuestión es que, a pesar de su precisión y poco peso, suele recalentarse en exceso; incluso es posible que se combe, sobre todo si se emplea el trípode, cuando el soldado utiliza el arma muy seguido.