Los últimos obuses fabricados para el Ejército ya están acabados en Trubia, donde los empleados temen que se agote la carga de trabajo.


Una decena de obuses espera en el recinto de la Fábrica de Armas de Trubia para ser entregados al Ejército. Son los últimos de un pedido que data de 2005 y que se ha ido entregando por fases. Se trata de obuses 155/52 milímetros SIAC, con capacidad para lanzar proyectiles de 155 milímetros a una distancia de 40 kilómetros. Los trabajadores de la fábrica observan con preocupación cómo, al igual que la construcción de estos obuses, los últimos que van a entregar al Ejército, se va acabando la carga de trabajo y no llegan nuevos contratos. En la actualidad, los trabajadores están construyendo treinta y seis barcazas para Bélgica, para la empresa Sabies. Dos de ellas ya están terminadas, pero si no llegan pronto más encargos estiman que quedarán sin carga de trabajo tras el verano, cuando finalizará el último gran contrato, el blindado «Pizarro» para el Ejército.

Los recortes del Ministerio de Defensa, que no tiene ninguna partida económica para nuevos contratos en el presupuesto de 2013, hacen que la empresa fije su mirada en el exterior para mantener su producción. La empresa ha diseñado un prototipo de transporte de tropas blindado para competir por un contrato «muy importante» para el Ejército de Dinamarca, y también tiene conversaciones con países africanos para vender varias unidades de sus vehículos blindados «Piraña». En el aire sigue el contrato que aseguraría el futuro de Santa Bárbara Sistemas, el del 8x8 para el Ejército español, que el Ministerio de Defensa ya no tiene entre sus prioridades, a causa de la crisis económica.

Fuente: http://www.fuerzas-armadas.es/

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