F-X2: Rousseff dijo en Francia que la decisión sobre la compra de cazas decombate se suspende.

La presidenta Dilma Rousseff , dijo el martes en París, que el gobierno brasileño decidió aplazar la decisión sobre la compra de 36 cazas para la Fuerza Aérea Brasileña (FAB). Según el presidente, la nitidez de la crisis internacional llevó a la suspensión de las negociaciones y de una decisión en relación con otras puede tardar "algún tiempo". "Tenga mucho cuidado al decidir el gasto más allá de lo que necesitamos para luchar contra la crisis", dijo Rousseff. Entre las opciones que el gobierno brasileño para rediseñar la FAB son los combatientes Rafale de Dassault de Francia, el F/A-18E/F Super Hornet estadounidense de Boeing y el Gripen NG , de la sueca Saab. Pero el proceso de selección aún no está claro.

Negociadores franceses y brasileños esperaban que la compra de los cazas fueran algunos de los temas abordados por el presidente durante su visita oficial a Francia. Rousseff participó este martes, junto con el presidente francés, François Hollanfe, en el Foro para el Progreso Social - Salida para el crecimiento como de crisis, patrocinado por el Instituto y la Fundación Lula Jean-Jaurès. Y luego tuvimos reunión con Dilma Hollande y ambos dieron una conferencia de prensa.
 
Los límites de las políticas de austeridad
En la entrevista, el presidente dijo que las políticas de austeridad que utilizan los países para luchar contra la crisis "muestra sus límites" y que los países excedentarios deben incrementar la inversión. Dijo que defiende a los compromisos del G-20, para crear empleos y generar crecimiento. Con Francia, Rousseff dijo que ampliará la cooperación en las áreas de espacio, defensa, energía y alimentos, además de aumentar el flujo de comercio.  

El presidente también agradeció al gobierno del país por su apoyo al país para integrar el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU), dijo que Brasil tiene una posición común con Francia en el reconocimiento de Palestina como Estado observador de la ONU. En el desempeño de la economía brasileña, el presidente admitió que hubo desaceleración en el tercer trimestre, pero restó importancia al resultado por debajo de lo esperado por el mercado. "Hemos llegado a un 0,6%, lo cual es significativo teniendo en cuenta las tasas trimestrales."
 
Fuente: http://www.cavok.com.br/